Muchas veces la desfachatez proviene de la impunidad y de creerse con todos los derechos. O peor aún, creerte un iluminado por la providencia.
Hay que tener mucha jeta para después de tantos siglos de persecuciones y hogueras en nombre de Dios, de azuzar el odio desde los púlpitos y de apoyar dictaduras, vengan con que fue en España en la II República la persecución más sangrienta a la Iglesia. De los curas vascos asesinados por los nacionales nada dicen. Ni de los miles de muertos. Que para eso era una cruzada. Con los mártires. Más que cuando los emperadores romanos. Y predican luego la paz y el amor. Y aguantar que los propongan a la caspa de los premios príncipe de Asturias.
Actuando con prepotencia y chulería, sabiéndose protegidos por la policía. Para celebrar en Madrid un megabotellón que los jóvenes madrileños no pueden hacer. Impidiendo el paso de la manifestación laica. Mientras contemplaban con displicencia la carga de la policía española. Tierra de Barrenaus describe muy bien lo que es la policía.
Predicando la palabra del Señor |
No hay comentarios:
Publicar un comentario