domingo, 30 de marzo de 2008

Mularroya, desmanes, esperanzas

Tras pasar unos días en el pueblo, con asuntos que preparar, con vistas a un próximo traslado, se vuelve a la que en los últimos tiempos es la rutina habitual. Ésta cambia en un sitio diferente y con cosas diferentes por hacer, llega a no echarse apenas en falta alguna comodidad, como internet, de la que por el mometo ahí se carece. Cuando uno está a gusto en un lugar es más sencillo. Otros no aguantarían vivir en un pueblo, por la tranquilidad y no disponer de los servicios de una ciudad. Pero hoy en día en un pueblo medio se está bien surtido, y más teniendo localidades más grandes muy cerca y estando cerca de Zaragoza. Tampoco hay gente que sepa valorar el encanto de la naturaleza, tengo la suerte de que mi casa da al campo. Se ve la rambla, el Jalón serpenteando y la sierra al fondo, atravesada por la brecha de la A-2 desde hace 15 años, al otro lado del monte de la Perdiz está precisamente Mularroya. Aún recuerdo cómo temblaban los cristales de casa con las explosiones para abrir la roca. Ver a diversas clases de pájaros, oir su piar, cómo se posan en el árbol te da una tranquilidad especial, herrerillos, cardelinas, petirrojos... Invita a la reflexión y a tomarse las cosas con perspectiva. Otros se aburrirían y le incomodaría hasta el piar de los pájaros. Incluso sin que intervenga que dos amigos sean reconocidos pajareros y aficionados al digiscoping.

Monte de la Perdiz desde casa.


Visité un par de veces Mularroya, la sensación que da es de tristeza, ver ese hermoso paraje con decenas de pinos derribados, que no han retirado, y saber que es una pequeña parte del enorme destrozo que van a hacer, te deja impotente en el momento. Más cuando desde la propia administración se incumple la sentencia del TSJA que ordena incluir esa zona en la ZEPA Hoces del Jalón, en éste caso el MIMAM, con la anuencia y el aplauso de los políticos de aquí. Evidentemente la reacción sería distinta si fuese un particular u otro colectivo quien incumpliera la sentencia judicial, como en el caso de Itoiz no les importa. Dentro de lo negativo, que sólo hubiera una máquina no es el peor de los escenarios, implica poco interés, que era una maniobra electoralista, o que no hay más dinero a pesar de los más de 100 millones de euros presupuestados.Contrasta además el color rojizo que queda al descubierto, con el más blanquecino de los alrededores. Lamentablemente se me olvidó la cámara de fotos en Miranda y no puedo ilustrar el artículo de esa manera, para el mes que viene, dónde espero que no hayan avanzado las obras.

Embalse de La Tranquera.



Coincidió con la aparición mensual de la Crónica de Valdejalón, que dedica además en su número 100 una entrevista al presidente comarcal Jesús Isla, del PSOE, y alcalde de Calatorao, firme defensor del pantano y que aparece su opinión en la noticia referente al inicio de las obras. Recibidas con alborozo por éste medio de comunicación tan parcial en éste asunto. En vez de informar, adoctrina. Obsérvese la redacción. Esta obra sigue las líneas del Programa AGUA del MIMAM que incorpora las actuciones históricamente propuestas, pero no desarrolladas que sean coherentes con los objetivos por su viabilidad económica y medioambiental. No sólo se justifica per se la obra debido a la antigüedad de su reclamación, sino que se presenta viable económicamente, sin ofrecer ningún dato del coste que se pagará por el agua, y medioambientalmente, no ofreciendo ningún dato sobre el interés ecológico de Mularroya ni mucho menos sobre la ZEPA. La misma retórica gastada de siempre, de augurar grandes beneficios, sin especificar.

Jesús Isla


No se queda atrás Jesús Isla. Mularroya es un proyecto que parte de una importante inversión que se hace en el territorio, que nunca es malo. Nos permitirá regular el Jalón, que en la actualidad carece de ese control. Por tanto, de primera, se va a regular un río de avenidas muy grandes y de un caudal respetable en invierno, pero con ausencia de caudal en agosto. Primero da por bueno un proyecto sólo por la cantidad de dinero, una cantidad importante que le vendría muy bien a la comarca aunque fuese la mitad para cualquier tipo de proyecto menos éste. El argumento es increiblemente simple. Sobre todo justificar una inversión que consiste en destruir tu patrimonio natural, por los que no lo saben apreciar, como comentaba en el primer párrafo. Incluyendo algunos endemismos presentes en Mularroya. Es lamentable la aceptación social de tales inversiones en éstas obras y con tan pocos argumentos. Además miente cuando dice que el Jalón no está regulado, está el embalse de la Tranquera, de 84 hm3 y desde 1959, y algún afectado aparece en el libro de Marisancho Menjón. También desconoce el ciclo natural dél río, que incluye las crecidas. Precisamente la mayor parte de los días que he pasado en Ricla el cauce estaba estancado, con muy poca agua, en marzo, cuando debería llevar un buen caudal, y a la par que la crecida del Ebro. El mismo Jalón que pasa por las afueras de Calatorao. Una estampa que no es extraña, gracias a la regulación de la Tranquera, situado en el afluente Piedra, y que está muy cerca del Monasterio de Piedra. Otro asunto es ver la regulación como algo intrínsecamente bueno. Lo único que puede decir es que se aproveche más en la comarca de Calatayud.

Vista de Mularroya con Google


Sigue. Tenemos, por tanto, la posibilidad de guardar el agua para poder utilizarla después; y ese es el principio básico del ahorro. Pero es que, además, con las posibilidades que ésta tierra tiene, nuestra única limitación actual era la falta de agua, porque no nos podemos olvidar que vivimos en el desierto de la depresión del Ebro. Tenemos una necesidad de regular agua y Mularroya nos permite hacerlo. Disparate tras disparate. Reformula las teorías sobre ahorro de agua, que predican no aumentar la demanda, es decir, no hacer más pantanos ni trasvases, destino real del agua de Mularroya, el trasvase por otra parte, sino la eficiencia con los recursos actuales y el respeto al entorno. Pese a esa limitación, Valdejalón es una de las comarcas frutícolas más importantes del país, Aragón, porque para él sería España, por los pozos y aguas subterráneas. No sé que industras pretende que se instalen que consuman tanta agua. Valdejalón es cierto que tiene zonas áridas, pero precisamente por eso, es incongruente talar una parte importante de tu mayor masa forestal. Se presenta como la única alternativa posible. De coger el agua y hacer una balsa en el llano, cediendo terreno, ni se comenta. Estoy de acuerdo en que el principio de agua por tierra es lo más justo.

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