UPyD se ha presentado ante la sociedad como una alternativa al cada vez mayor bipartidismo entre PSOE y PP. También como el partido regenerador de la vida democrática española, sin los vicios y defectos de los demás, y abierto a la pluralidad de opiniones. Todo ello choca con el carácter autoritario e intransigente de su líder, Rosa Díez. Las consecuencias han sido visibles incluso antes de lo previsto.
Tras su congreso nacional de este partido nacionalista español, han decidido suspender a la cúpula del partido en Aragón. Parece ser que pedían listas abiertas como la propia Rosa Díez propugnaba al principio. Esa es su respuesta a la pluralidad interna y a que se le recuerden sus promesas. Es curioso que les acusen también de suplantar al partido y buscar candidatos, vamos que un partido busca siempre nuevos afiliados o simpatizantes.
Líos internos que observo con indiferencia, lo último que necesitaba Aragón era otro partido más nacionalista español que los que ya había. Simplemente vuelve a dejar patente cómo es esa gran demócrata española y defensora de las libertades que es Rosa Díez.
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