viernes, 9 de febrero de 2007

Moroso


En los comentarios al conocido como estatutico, tanto en este blog como cualquier otro que ha tratado del tema, hemos comentado el tema de la financiación y la deuda histórica. De la financiación ya hemos visto que no vamos a tener por el estatuto, una obligación inversora por el Estado, acorde a los parámetros que más nos pudieran beneficiar (extensión, comunidad fronteriza, baja densidad de población y envejecimiento...). Este es un tema importante, sin dinero, no se puede ofrecer unos buenos servicios a los ciudadanos, que es de lo que se trata. No torticeramente como quieren hacer creer los nacionalistas españoles, ganas de fastidiar o querer ser más, son ellos quienes han establecido siempre las diferencias entre ciudadanos de una comunidad u otra. Este es un tema aparte, y si los andaluces han cobrado su deuda o lo van a hacer, nosotros no somos menos, le hacen pensar a uno que la diferencia es que unos tienen 62 escaños y otro 13. En la genial visión de Vaya Semanita, habrá que enviarles al cobrador del bar, un txikitero, ahora que pienso, éste recoge principalmente deudas del bar, cantando bilbainadas.

A mí me gusta...


Desde el prejuicio, centralismo y desconocimiento, se tilda de capricho estas demandas, sin preocuparse del fondo, investigar los motivos, desde su política de intereses rehusan estas incomodidades y se dedican a negarlas y descalificarlas. En beneficio etéreo e inconcreto de España, como si Aragón no formara parte de ella y mereciera un buen trato. Para estar así, mejor independientes, nos gestionamos sólos y al menos nos mandarán mal pero serán aborígenes y no de fuera. Triste consuelo. Pero con la deuda saldada. Además ahora el segundo de Solbes, es nacido en Aragón, con sus acciones demuestra que no quiere ser aragonés, hay que sentirlo, un sujeto llamado Carlos Ocaña. No pretendemos un trato de favor, pero ingenuamente aún creemos que teniendo un presunto paisano, conocería mejor nuestras necesidades y estaría más cercano y receptivo a poner soluciones. Más fácil que si no lo fuera. En teoría no tendría que ser así ni existir estas discriminaciones seculares. Con otro morlaco como Víctor Morlán, secretario de estado de infraestructuras, vemos que seguimos como siempre, con el Canfranc sin ir más lejos, vagas promesas y ningún compromiso serio y decidido.


¿Deuda? Yo no saber nada.

Se comportan como verdaderos tahures, con las cartas marcadas y desde una posición de preeminencia abusiva y de corte colonial. De un modo ladino, mezquino y rácano. Ya hemos comentado que lo de Ocaña es más grave, se comporta como un cipayo. Debería ser declarada persona non grata, que se quede en España y no vuelva, que es su único interés. Aragón siempre les ha servido para equilibrar las cuentas, contando con la pasividad indígena, a la que se le ha aleccionado para buscar enemigos en Cataluña y Euskadi, cuando quien nos perjudica es quien manda, es decir, el Gobierno Central. Una maniobra manipuladora y mezquina, conocida como el barranco centralista. Si vascos y catalanes buscan lo mejor para ellos están en su derecho, nosotros deberíamos hacer lo mismo y no hacer de defensores patrios de un Estado que nos maltrata y que sólo se ocupa de nosotros para sacar un beneficio (trasvase) o usarnos como ariete contra otros. A fin de cuentas si vascos y catalanes tienen más competencias es porque el Gobierno central se las ha dado. Porque ha querido, y no por un supuesto chantaje de apoyo parlamentario, coartada de los españolistas para justificar las diferencias territoriales.


Ocaña, engominado y remilgado.

En diciembre, el servil Ocaña presentaba el informe ministerial sobre la financiación autonómica, que dice "La Administración General de Estado no dispone del margen de maniobra financiero con el que contaba en el momento de aprobación de los anteriores sistemas de financiación". Aunque el propio Gobierno crea que el sistema nuevo no se aprobará hasta pasadas las elecciones de 2008. Que listos, una vez que han prometido por norma estatutaria a ciertas comunidades, las demás que arren, o como han hecho siempre, nivelen las cuentas del Estado. Y declaraba "No deberían centrarse en la aportación de recursos adicionales por parte del Estado, entre otros motivos porque apenas hay traspasos competenciales en cartera que justifiquen tales transferencias económicas". Así se olvida de transferencias infradotadas económicamente en su día, y de paso de la deuda histórica consiguiente. Si hay nuevas competencias, tendrán que estar dotadas económicamente de algún modo. Sólo ofrece subir los impuestos de gestión autonómica, o bajarlos dice, debe ser receta neoliberal, por la patraña de la macroeconomía y las cifras generales, sin importar el reparto de riqueza. Y se llaman socialistas.




Concretamente en el IRPF, el IVA y los impuestos especiales, de los que gestionan el 33%, el 35% y el 40%. No tiene por qué elevar sus ingresos, pues se compensará con la reducción del fondo de suficiencia, con el que el Estado equilibra las cuentas de las comunidades cuya recaudación fiscal queda por debajo de la prevista. La idea gubernamental es que la reforma del sistema le salga prácticamente gratis. Para colofón, Ocaña anuncia que el factor principal será la población, aunque habrá alguna otra variable. Dar más transparencia a la solidaridad interterritorial (sic), pero sin citar que comunidades aportan y cuales reciben. Curiosa manera. En resumen general, el contubernio de siempre. Medidas que seguro son aplaudidas por los sectores más centralistas, únicamente proecupados por mantener su posición de privilegio.


Propuesta para sus inmerecidas vacaciones.

A finales de enero, después de las diferentes formas de financiación, asegurado y no asegurado, tiene la caradura de decir "Será igual para todas", y "Eso no quiere decir que todas las comunidades reciban la misma cantidad de euros". Es normal, unas son más grandes, más pobladas, más despobladas y envejecidas, más cercanas a la media europea o no. Pero ustedes son los que aumentan las diferencias, no sean cínicos. Ustedes casi exclusivamente contemplan la población. Y pretende solucionar esa china en el zapato italiano, de la deuda histórica. La misma que dice que hay que ver si existe, para declararle persona non grata y prohibirle la entrada en el país, él seguro que estaría contento de quedarse sólo en España, que no vuelva. Con una inversión pactada, de la que no da ninguna cifra, a día de hoy de la deuda tributaria de recorte de impuestos unilateral por el estado y transferencias infradotadas, anda por los 500 millones de euros. Esto haría que fácilmente recorte, meta lo que él crea que es pago de deuda, con inversiones indefinidas, pague lo mismo que sin deuda y diga que haya pagado la deuda. Absolutamente colonialista y despreciativo. Seguramente aún encontraría la colaboración de los políticos autóctonos. Todo con tal de no incomodar a la metrópoli. De la deuda histórica total, 6000 millones de euros, mejor no decir nada.



"La financiación será igual para todas"


http://www.chunta.com/ Para ver el powerpoint del estatuto y sus desigualdades.

No hay comentarios:

Qué inocentes éramos

 Septiembre es un mes que emana cierta melancolía. El verano va acabándose y empiezan a amarillear las hojas. Me gusta la luz tamizada y una...