Una de las cosas indignantes de los pantanos es la diferencia de celeridad para dar dinero para construirlo y para las restituciones. Así en Lechago las van a empezar a recibir siete años después de iniciada la obra y cuando ya está finalizada. Cuando debería de ser en paralelo a la ejecución. Eso sí, en pequeña cantidad no vaya a ser que se les atragante. Ahí les hace duelo gastarse el dinero o hay limitación de presupuesto. No lo hay para meter partidas a punta pala para la obra aunque supere el presupuesto inicial. Más vale tarde que nunca.
Antes escribía más, ahora hablo principalmente del Real Zaragoza y alguna otra cosa. Blog hermano https://laochentadadeldia.blogspot.com/
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Qué inocentes éramos
Septiembre es un mes que emana cierta melancolía. El verano va acabándose y empiezan a amarillear las hojas. Me gusta la luz tamizada y una...
-
El lobo siempre ha sido un animal con un aura especial, temido, odiado, un elemento identificativo de nuestro entorno y cultura popular. Pe...
-
El mundo taurino se precia de ser una lucha de igual a igual, a pesar de la rémora física con la que sale el toro a la plaza, y del arsenal ...
-
Me llegan éstas reflexiones de María Victoria Trigo Bello, que pide que se publiquen coincidiendo con el día internacional de los ríos. Mere...
No hay comentarios:
Publicar un comentario