jueves, 22 de junio de 2006

El congreso de los ratones

Es difícil escribir sobre lo que acaban de perpetrar, un politiqueo cateto, falto de miras, complaciente con si mismos y con el Estado, sumiso, un apaño con demasiadas prisas al final y un acuerdo despótico, tras tres años desde el inicio de la ronda de ponencias sobre el estatuto. Pero todo esto por duro que suene, es lo que Aragón se merece, este país ha parido estos políticos y la gente los ha votado, así que hay que apechugar con lo que hagan. Eso sí, aún tendremos que ver la desfachatez de como políticos y personas de a pie critican a otras comunidades por tener más competencias, cuando aquí se ha renunciado de antemano a tenerlas. Ya ni hace falta ir a Madrid a que te pasen la segadora, se bastan ellos solicos en las Cortes aragonesas para hacer el ridículo. Esos políticos afincados en Madrid como abueletes frente a una obra, que se les llena la boca con una repugnante hipocresía hablando de igualdad, solidaridad, cuando nunca la han aplicado por igual ni intención que llevan. Si cumples la constitución, ese consenso insertado en un marco o al revés, te recortan, porque sí, por capricho, porque deben de sentir complejo de inferioridad y así reafirman su dominación y poder, y las que te dan, ese sucedáneo de carta otorgada que es un estatuto, donde la soberanía reside en gente ajena al país, muchas no las cumplen. Luego eso sí, hablan de lealtad, absolutamente indignante, si quieren lealtad, que la tengan ellos primero con Aragón. Y cuando esto es reiterativo, para mi, aunque sea moralmente, pierde cualquier legitimidad que tuviera. Porque aún se creen que les tenemos que estar agradecidos. Y si te sales de la constitución, entonces te dicen que tienes que seguirla, cuando son los primeros en saltársela a su capricho y conveniencia, los encajes de las cuentas tienen que salir de algún sitio y ese es fácil, y en usarla de modo partidista. ¿Y si te quejas? eres un insolidario. Para ser solidario o hay que ser "pobre oficial" o llevar la palabra España delante. Así nos luce el pelo. Lo peor de todo es que dicen que va a ser un estatuto para varias décadas.
Más que nunca fue PPSOE, haciendo un frente común pata echar atrás todas las propuestas con amplitud de miras. En base a un acuerdo, según Marcelino el pusilánime. Sintomática la alegría pepera con este estatuto, con la que ha liado en otras comunidades. En el perfecto papel de ser puta y poner la cama. En el papel de barranco centralista que se nos ha asignado, somos mejores porque PP y PSOE están de acuerdo, ¿cuando estos partidos han hecho algo por Aragón en sí mismo? Es decir, que otra zona de España o su idea sobre el Estado no se viera beneficiada. Por ejemplo con el conflicto de la Franja, ¡tras más de diez años! lo sacan a la plana los medios estatales, ¿para apoyar a Aragón? no, para meterse con Cataluña, en plena vorágine del archivo de la Guerra Civil y del estatut. Se nos usa para su beneficio y aquí tan felices, en esta sociedad que parece narcotizada, o simplemente contenta de que otros decidan por ella, de conformarse en la medianía y de estar diluída dentro de España. Se podría hablar del proceso de castellanización desde hace tanto tiempo. Porque no es una integración en plano de igualdad o tratándote con respeto, sino siempre a su interés. Aún lo han puesto como ejemplo de la tradición pactista aragonesa, perversionada, porque ésta nunca fue sumisa al poder, sino limitadora de este. PSOE, PP, PAR e IU pasan negativamente a la historia. ¿Habrá una reacción? Penica de país.
"Señores diputados, la situación es extremadamente grave.
Debemos hacer un consenso para meterlo dentro de un marco,
¡Qué monada!
Como primer punto del orden del día, actualizaremos nuestro sueldo.
Como segundo punto bajaremos el de los demás."
Qué felices son haciendo el mamón,
siempre en nombre de la razón;
Y su libertad vigilada por los cañones del capital.

Estáis todos acojonaos por el ejército
y vendidos a todos los banqueros,
camuflando en democracia este fascismo,
porque aquí siempre mandan los mismos.

Un congreso de ratones podíais formar.
No representáis a nadie.
¿Qué os creéis? ¿A quién queréis engañar?

Quiero soberanía personal,
mi representación soy sólo yo
y nada me puede obligar
con vuestra constitución.

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