No nos vamos a sorprender a estas alturas de que Trasobares encarna lo que es el progresismo del sí pero no y que hay ciertas cuestiones en las que muestra la patita. Siendo sin duda el independentismo uno de ellos. Después de la importante noticia del desarme de ETA, verificado internacionalmente, que alguien presuntamente progresista venga a poner palos en las ruedas y a alinearse con la derecha española, muestra lo que es cada uno. Al final hay temas en la que todos los españoles se juntan. Que el escepticismo se puede entender, las reservas, pero después de todo lo avanzado ene ste proceso pues creo que cada vez tiene que haber menos dudas. Sobre todo no son de recibo unas declaraciones insidiosas. No, así no se avanza, conceda al menos el beneficio de la duda, tenga amplitud de miras ante una cuestión histórica y si no quiere colaborar, apártese.
El problema es que esta comedia demencial tiene su público y no poco éxito. ETA sublima su repugnante trayectoria en cada éxito electoral de la izquierda abertzale (¿izquierda?).
Comedia demencial en la que debe de haber un contubernio internacional que debe prestarse a ello. Se meten con España. Que relacione los asesinatos de ETA con un partido legal, que en sus estatutos renuncia y condena la violencia, cosa que esa sí que no se difunde adecuadamente, eso, sí que es repugnante. Digno de cualquier columnista de la derecha española. A la vez que hace uso del apolillado y falso sofisma de que no se puede ser independentista y de izquierdas. Solo si se cuenta con un estado nación. De izquierdas debe ser poner trabas al proceso de paz. Qué triste.
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